Paris, Te Amo
Título original: Paris, je t’aime
País: Francia
Idioma: Francés, inglés, español, árabe y mandarín
Género: Romance
Año: 2006
Duración: 1 hora 30 minutos
Directores: Varios
Actores: Gerard de Pardiu, Stve Buscemi, Catalina Sandino, Juliette Binoche, Willem Dafoe, Nick Nolte, Magguie Gyllenhaal, Elijah Word, Natalie Portman, Ben Gazzara, entre otros.
4 estrellas
18 historias fabricadas por 20 directores en Paris, la mítica capital del amor. Un homenaje a la ciudad romántica por excelencia.
Buenas y buenísimas
El Metro.
La expresividad del rostro de Steve Buscemi, actor de catálogo de los directores Cohen (Fargo), produce sentimientos encontrados, por momentos ríes y por otros dices ¡cómo pueden hacer esto!. Buscemi es un turista y como el resto del mundo –menos en Fancia- observa a las personas de al lado, de enfrente, como el par de enamorados que demuestran su amor en extrañas maneras. Rodada en el tradicional Metro de París.
La niñera
Qué bárbaro es el brasileño Walter Salles (Diarios de motocicleta) y Daniela Thomas, la denuncia social latinoamericana la trabajan con guantes de seda, impecable su trabajo, cuando pudo caer fácilmente en clichés. Catalina Sandino es una actriz de primer nivel, y nunca habla, sólo canta dos veces la misma canción de cuna, una a su hijo y la otra al hijo de su patrona, suficiente para tocar sensibilidades y ver realidades humanas.
Los mimosDel mismísimo director de Corre, Lola, Corre y El perfume: historia de un asesinato, este alemán vuelve a hacer de las suyas, obras inolvidables, acá más similar al espíritu de Corre…, ya que llega al grado de poesía sus vertiginosas secuencias que circulan sobre ellas mismas, afectándoles el tiempo y viendo la evolución de su amor terminando en desamor que, como gran torbellino, inicia en la punta y se lo traga el ojo del huracán.
La turista
Este film resume en mucho el sentido de la película en conjunto. Una mujer feliz por viajar y admirar hermosas vistas, peso a que reconoce que no tiene a nadie con quien compartir su felicidad, un compañero de viaje, sin embargo lo acepta y no deja que esto menoscabe su emoción. Una mujer que encuentra la felicidad que una ciudad le puede brindar, aunque sea en solitario.
Los vampiros
Vicenzo Natalie, su director, juega en algo tan macabro como lo es el vampirismo. Paris, la ciudad del amor, también lo es para los colmilludos, terminando devorándose a causa del amor, y sobretodo, con mucho humor.
Regulares y pasables
La mujer desmayada
Puede ser un buen inicio de un largometraje, sin embargo no conduce a nada y le faltan minutos para desarrollar la historia. Esta historia trata de la búsqueda del amor de pareja. Hay detalles curiosos, como el uso de carros pequeños europeos (disculpen la redundancia) y cómo se percata del desmayo. Quizá lo más representativo es que su director, Bruno Podalydes, es de origen francés.
La chica árabe
El tema del amor interracial no es tan original, sin embargo aún es problema de nuestros tiempos. Aquí unos chicos jovencísimos molestan con “piropos” a las chicas parisinas, pero la chica árabe aparece, con un final nada sorprendente. Su director, Gurinder Chadha, sólo narra lo que sucede esa es su aportación fundamental, como lo hizo en la famosa cinta Bend it Like Beckham.
La peluquería china
Me recordó a Kill Bill, donde la protagonista, con conocimiento de artes marciales y figura estilizada, provoca enfrentamientos con sus invitados. Mucho surrealismo, puertas de cristal que rompen, pelucas de colores, desfiles de moda en un barrio parisino, con un vendedor de seguros que termina incorporándose al extraño paisaje. El australiano Christopher Doyle (director de fotografía de Lady in Water) sabe tomarse al cine en su faceta liviana, pero no superficial.
La desahuciada
Una prueba de amor en un contexto de enfermedad. La decisión de quedarse por compasión con el ser desahuciado, aunque no lo ames, produce en este caso un resultado no convencional.
La actriz
Maggie Gyllenhaal es magnífica, pese a que la historia es insípida, ella ilumina la pantalla interpretando a una actriz que se relaciona con un vendedor de drogas, que no vuelve a aparecer.
Los actores adultos
Dos personas en sus sesentas, intentan revivir su amor en juegos de seducción por los prostíbulos de París. Todo tiene sentido cuando vemos la evolución de sus interacciones y la toma final al cartel que anuncia alguna obra con sus rostros.
Los divorciados
Dirigido por Gerard Depardieu, la historia es de una pareja de edad avanzada que conversan maduramente sobre su divorcio y bromean muy creativamente. Es ante todo, el reencuentro de una pareja: Ben Gazzara y Gena Rowlands.
Malas y no logradas
La imprenta
Lo que más atrae es el ambiente parisino que generalmente no se ve en otras películas, los talleres de imprenta, por ejemplo, los cuales se ve cargan años produciendo libros o periódicos en el mejor de los casos. Sin embargo en cuanto a historia, se puede decir que tampoco es contundente y que el impacto de la interacción entre estos dos jóvenes que apenas llegan a conocerse, queda como mera anécdota. Queda claro que Gust Van Sant (To die for, Good Hill Hunting) es mejor con los lagometrajes que este tipo de proyectos.
La mujer que llora por su hijo
El elemento onírico no ayuda, parece que se quieren manejar elementos simbólicos, como el caballo montado por Dafne y el llanto en plena calle de Binoche. Sólo buenos actores destacan en este segmento, Desgraciadamente no provecho del todo este espacio el japonés Nobuhiro Suwa.
Nick Nolte y Ludivine caminan
¿Qué le pasó a Cuarón? Es pésimo este fragmento, no conduce a nada es una fugaz charla de calle entre la pareja. Ni las características de ser una sola toma y el final “sorpresivo” (Nolte se queda con un bebé en carreola) ayudan a subir la calidad de esta historia, muy diluida.
La pareja del cementerio
Cliché total. El fantasma que se aparece para ayudar al enamorado reconquistar a la pareja. Recuerda los cientos de momentos en pantalla donde al llevar serenata el amigo le sopla los versos o canciones a recitar, claro, que desde Romeo y Julieta este truco funciona. Y para darle el ambiente macabro Wes Craven (Scream), su director, no dejó pasar la oportunidad de filmar en el cementerio parisino.
País: Francia
Idioma: Francés, inglés, español, árabe y mandarín
Género: Romance
Año: 2006
Duración: 1 hora 30 minutos
Directores: Varios
Actores: Gerard de Pardiu, Stve Buscemi, Catalina Sandino, Juliette Binoche, Willem Dafoe, Nick Nolte, Magguie Gyllenhaal, Elijah Word, Natalie Portman, Ben Gazzara, entre otros.
4 estrellas
18 historias fabricadas por 20 directores en Paris, la mítica capital del amor. Un homenaje a la ciudad romántica por excelencia.
Buenas y buenísimas
El Metro.
La expresividad del rostro de Steve Buscemi, actor de catálogo de los directores Cohen (Fargo), produce sentimientos encontrados, por momentos ríes y por otros dices ¡cómo pueden hacer esto!. Buscemi es un turista y como el resto del mundo –menos en Fancia- observa a las personas de al lado, de enfrente, como el par de enamorados que demuestran su amor en extrañas maneras. Rodada en el tradicional Metro de París.
La niñera
Qué bárbaro es el brasileño Walter Salles (Diarios de motocicleta) y Daniela Thomas, la denuncia social latinoamericana la trabajan con guantes de seda, impecable su trabajo, cuando pudo caer fácilmente en clichés. Catalina Sandino es una actriz de primer nivel, y nunca habla, sólo canta dos veces la misma canción de cuna, una a su hijo y la otra al hijo de su patrona, suficiente para tocar sensibilidades y ver realidades humanas.
Los mimos
Qué gran director es Sylvain Chomet, lo comprobamos en su anterior producción animada “Las trillizas de Belleville” (2003), ojalá realizara más trabajo en cine, cada obra suya es una joya, su imaginación y estética se concreta perfectamente y es un placer ver como dos mismos se enamoran, claro, muy parecido y muy diferente a los demás.
El desangrado en la Plaza
Las coincidencias del amor pueden ocurrir, aunque sean en los últimos segundos de nuestras vidas. Y eso es tristísimo. Tendremos que seguirle la huella a este director sudafricano (Oliver Schmitz), que toma la fragilidad humana y la combina con los deseos logrando un producto sumamente enternecedor y a la vez desconcertante. Una obra redondita.
La actriz y el ciego
El desangrado en la Plaza
Las coincidencias del amor pueden ocurrir, aunque sean en los últimos segundos de nuestras vidas. Y eso es tristísimo. Tendremos que seguirle la huella a este director sudafricano (Oliver Schmitz), que toma la fragilidad humana y la combina con los deseos logrando un producto sumamente enternecedor y a la vez desconcertante. Una obra redondita.
La actriz y el ciego
La turista
Este film resume en mucho el sentido de la película en conjunto. Una mujer feliz por viajar y admirar hermosas vistas, peso a que reconoce que no tiene a nadie con quien compartir su felicidad, un compañero de viaje, sin embargo lo acepta y no deja que esto menoscabe su emoción. Una mujer que encuentra la felicidad que una ciudad le puede brindar, aunque sea en solitario.
Los vampiros
Vicenzo Natalie, su director, juega en algo tan macabro como lo es el vampirismo. Paris, la ciudad del amor, también lo es para los colmilludos, terminando devorándose a causa del amor, y sobretodo, con mucho humor.
Regulares y pasables
La mujer desmayada
Puede ser un buen inicio de un largometraje, sin embargo no conduce a nada y le faltan minutos para desarrollar la historia. Esta historia trata de la búsqueda del amor de pareja. Hay detalles curiosos, como el uso de carros pequeños europeos (disculpen la redundancia) y cómo se percata del desmayo. Quizá lo más representativo es que su director, Bruno Podalydes, es de origen francés.
La chica árabe
El tema del amor interracial no es tan original, sin embargo aún es problema de nuestros tiempos. Aquí unos chicos jovencísimos molestan con “piropos” a las chicas parisinas, pero la chica árabe aparece, con un final nada sorprendente. Su director, Gurinder Chadha, sólo narra lo que sucede esa es su aportación fundamental, como lo hizo en la famosa cinta Bend it Like Beckham.
La peluquería china
Me recordó a Kill Bill, donde la protagonista, con conocimiento de artes marciales y figura estilizada, provoca enfrentamientos con sus invitados. Mucho surrealismo, puertas de cristal que rompen, pelucas de colores, desfiles de moda en un barrio parisino, con un vendedor de seguros que termina incorporándose al extraño paisaje. El australiano Christopher Doyle (director de fotografía de Lady in Water) sabe tomarse al cine en su faceta liviana, pero no superficial.
La desahuciada
Una prueba de amor en un contexto de enfermedad. La decisión de quedarse por compasión con el ser desahuciado, aunque no lo ames, produce en este caso un resultado no convencional.
La actriz
Maggie Gyllenhaal es magnífica, pese a que la historia es insípida, ella ilumina la pantalla interpretando a una actriz que se relaciona con un vendedor de drogas, que no vuelve a aparecer.
Los actores adultos
Dos personas en sus sesentas, intentan revivir su amor en juegos de seducción por los prostíbulos de París. Todo tiene sentido cuando vemos la evolución de sus interacciones y la toma final al cartel que anuncia alguna obra con sus rostros.
Los divorciados
Dirigido por Gerard Depardieu, la historia es de una pareja de edad avanzada que conversan maduramente sobre su divorcio y bromean muy creativamente. Es ante todo, el reencuentro de una pareja: Ben Gazzara y Gena Rowlands.
Malas y no logradas
La imprenta
Lo que más atrae es el ambiente parisino que generalmente no se ve en otras películas, los talleres de imprenta, por ejemplo, los cuales se ve cargan años produciendo libros o periódicos en el mejor de los casos. Sin embargo en cuanto a historia, se puede decir que tampoco es contundente y que el impacto de la interacción entre estos dos jóvenes que apenas llegan a conocerse, queda como mera anécdota. Queda claro que Gust Van Sant (To die for, Good Hill Hunting) es mejor con los lagometrajes que este tipo de proyectos.
La mujer que llora por su hijo
El elemento onírico no ayuda, parece que se quieren manejar elementos simbólicos, como el caballo montado por Dafne y el llanto en plena calle de Binoche. Sólo buenos actores destacan en este segmento, Desgraciadamente no provecho del todo este espacio el japonés Nobuhiro Suwa.
Nick Nolte y Ludivine caminan
¿Qué le pasó a Cuarón? Es pésimo este fragmento, no conduce a nada es una fugaz charla de calle entre la pareja. Ni las características de ser una sola toma y el final “sorpresivo” (Nolte se queda con un bebé en carreola) ayudan a subir la calidad de esta historia, muy diluida.
La pareja del cementerio
Cliché total. El fantasma que se aparece para ayudar al enamorado reconquistar a la pareja. Recuerda los cientos de momentos en pantalla donde al llevar serenata el amigo le sopla los versos o canciones a recitar, claro, que desde Romeo y Julieta este truco funciona. Y para darle el ambiente macabro Wes Craven (Scream), su director, no dejó pasar la oportunidad de filmar en el cementerio parisino.
8 comentarios:
No comparto varias de las clasificaciones, pero me gustó como descibiste las historias.
:)
Mi favorita fue: La Turista
Gracias TP, por cierto me encantaría conocer tus clasificaciones ;)
Paris te amo... donde la viste?
como la consigo?
yo la vi la semana pasada. y la que mas me gusto fue la turista. no quiero ir a francia solo...
MUERO POR VERLA... me pregunto lo mismo que memo... (o te recuerdo por MSN para que me digas o regreso a jorobarte por aqui)
:)
Memo: La peli estuvo la semana pasad en el cine. Como es costumbre, este tipo de pelis las quitan lo más pronto posible. No dudo que en los próximos meses estará en DVD. les aviso en cuanto lo vea.
Mi favorita, después de la Alexander Payne, que concuerdo contigo resume muy bien el espiritu del proyecto, fue sin duda la pelicula de Wes Craven. Un discurso sobre el amor y el humor, en un escenario que no podian dejar de lado en una pelicula sobre Paris y donde lo menos que tiene que ver es el sentido macabro del mismo. No es cualquier fantasma, es Oscar Wilde for crist sake. Y la pareja es adorable y refrescante despues de unos exagerados mismos, un moderno corto a lo lola corre (para nada cliche, con el vertiginoso montaje,la musica acelerada y la ultima frase del actor principal) y sobre todo unos ridiculos vampiros!
Muchas gracias por tu comentario Praying, ha sido bienvenido.
Que bueno que no todos pensamos y sentimos igual. Agradecería siguiéramos compartiendo puntos de vista sobre el cine que vemos.
Publicar un comentario